+34 616797219 hola@inspiri.es

¿Has pensado cómo escribir para posicionar en google y mejorar tu SEO?. Fue Bill Gates quien dijo hace años que “Si tu negocio no está en internet, tu negocio no existe”, pero hoy día estar en internet ya no es suficiente. Si tus contenidos no aparecen en las primeras posiciones de Google, simplemente no existen para gran parte de tu público objetivo. Y aquí es donde entra la redacción SEO: una forma de escribir que tiene en cuenta tanto a los buscadores como a las personas.

En este post te explicamos cómo escribir para posicionar en Google sin perder la naturalidad y sin sonar artificial. ¿Cómo escribir para generar awareness o reconocimiento de marca teniendo en cuenta el SEO? Porque el SEO bien hecho no se nota, pero se nota que funciona.

1. Define tus palabras clave (y cómo usarlas)

Antes de escribir una sola línea, necesitas saber qué está buscando tu público. No se trata solo de escribir sobre un tema interesante, sino de usar las palabras que tu audiencia utiliza cuando busca en Google.

¿Cómo hacerlo?

  • Usa herramientas como Google Keyword Planner, AnswerThePublic o Semrush.

  • Piensa como pensaría tu target, tu cliente ideal o potencial: ¿qué pondría en el buscador?

  • Combina palabras clave principales con secundarias (sinónimos, variaciones y long tail).

¿Dónde incluirlas?

  • En el título

  • En la introducción

  • En subtítulos (H2, H3)

  • En el texto, de forma natural

  • En la URL o slug, si es posible

  • En el meta título y la meta descripción

  • En los atributos ALT de las imágenes

Evita el keyword stuffing: repetir la palabra clave de forma forzada solo te restará puntos con Google y hará que tu texto suene poco profesional.

2. Escribir con una estructura

Una estructura o arquitectura de la información clara y sencilla y escribir con «patrón F» para la lectura en pantalla mejora la experiencia de usuario (UX)y además el SEO. Y todos sabemos que Google premia la buena experiencia de usuario. Si tu texto es fácil de leer, con una estructura lógica y bien organizada, tienes mucho ganado. Piensa que el robot de Google escanea tu contenido para entenderlo… y valora que esté bien presentado.

Consejos para estructurar:

  • Utiliza patrón en F
  • Usa títulos jerárquicos: H1 (solo uno), H2 para secciones y H3 para subapartados.

  • Divide el contenido en bloques temáticos.

  • Añade listas, viñetas y negritas para facilitar la lectura.

  • Escribe párrafos cortos (máximo 4-5 líneas).

  • Incluye un resumen inicial y una conclusión final.

Esto no solo ayuda a Google, también mejora la retención del lector: si es fácil de leer, es más probable que se quede y siga navegando, mayor retención.

3. Escribe para personas (aunque pienses en SEO)

Uno de los errores más comunes al escribir para posicionar es obsesionarse con Google y olvidarse de quien importa: tu lector. Un buen texto SEO tiene que ser útil, claro y natural. No basta con insertar palabras clave, hay que aportar valor real. ¿Cómo? Resolviendo dudas, ofreciendo soluciones o inspirando a tu audiencia.

Recomendaciones prácticas:

  • Elige un tono que encaje con tu marca: cercano, profesional, técnico, divulgativo…

  • Crea contenido original, evita copiar o parafrasear sin aportar nada nuevo.

  • Aporta ejemplos reales, casos prácticos o datos que respalden lo que dices.

  • Incluye llamadas a la acción (CTA): invitar a leer otro post, descargar un recurso o contactar contigo.

Recuerda: Google mejora constantemente su algoritmo para detectar la calidad. Si tu contenido no ayuda a las personas, no posicionará, por muy optimizado que esté.

4. Optimiza aspectos técnicos para SEO en tu web (pero no te obsesiones)

Aunque este post se centra en la escritura, hay factores técnicos que influyen en el posicionamiento y que puedes tener en cuenta desde la redacción.

  • URLs amigables: cortas, descriptivas y sin caracteres raros.

  • Meta título y meta descripción: son la primera impresión en Google. Hazlos claros, atractivos y con palabra clave.

  • Imágenes optimizadas: usa formato ligero y añade el atributo ALT con palabras clave relacionadas.

  • Enlaces internos y externos: enlaza a otros contenidos útiles de tu web y a fuentes externas de autoridad.

  • Tiempo de carga: si tu web tarda en cargar, tu contenido puede ser excelente… pero nadie lo verá.

5. Mide y mejora: el SEO no termina al publicar

Una vez que publicas, empieza otra fase clave: medir el rendimiento. Usa herramientas como Google Analytics o Search Console para ver qué funciona y qué no.

Observa:

  • Qué palabras clave están generando tráfico

  • En qué posición aparece tu contenido

  • Cuánto tiempo pasa la gente leyendo

  • Qué porcentaje abandona sin interactuar

Con esa información, puedes actualizar el post, añadir más contenido o ajustar la estrategia. El SEO es un proceso continuo, no una acción puntual.

En resumen, escribir para Google no significa escribir para robots. Significa entender cómo buscan las personas, ofrecer contenido útil y presentarlo de forma clara y estructurada. La clave está en encontrar el equilibrio: contenido de calidad, optimizado con estrategia, y pensado para conectar con quien lo lee.

Si necesitas apoyo para que tus contenidos posicionen mejor y reflejen el valor real de tu empresa, en Inspiri te ayudamos a escribir con intención y enfoque estratégico.