¿Por qué lo llaman emprendeduría cuando quieren decir emprendimiento?. Reconozco que yo era de las que empecé diciendo emprendeduría, supongo que por que todo lo malo se pega (eso me decía la madre de una amiga ;)), hasta que una escritora amiga me corrigió y ¡agradecida en el alma que le estoy, oye!. Ahora me he unido a ella en esta lucha y espero corregir y ayudar a más de uno o una con este post ;).
¿Cuál es la forma correcta: emprendeduría o emprendimiento?
Igual que les habrá pasado a otras muchas personas, imagino que yo no me molesté nunca (hasta que apareció mi amiga, claro) en confirmar cuál de las dos palabras era la correcta porque me fiaba de las fuentes ¿cómo no iba a fiarme?, sobre todo porque la mayoría provenían (y provienen) de instituciones públicas, escuelas de emprendimiento, centros de formación, formadores, comunicadores, medios, «guruses» del empleo 2.0, emprendedores, inversores, coaches, grandes empresarios, cámaras de comercio y un sinfín de actores que están metidos en el mundillo este del emprendimiento (que no de la emprendeduría). ¡Claro, si no te fías de ellos…! ¿de quien si no?
Señoras y señores, la palabra correcta y admitida por la RAE es emprendimiento, si no, compruébalo por ti mismo en el enlace. Aunque visto lo visto, probablemente se planteen en un futuro incluir emprendeduría o quizás ya lo tengan sobre su mesa de discusión.
Todo esto, además de aprender a utilizar la palabra correcta, también me ha enseñado que «no es oro todo lo que reluce» , que hay que comparar y que algunas veces es mejor adquirir una buena bisutería.
Y tú, ¿qué decías: emprendeduría o emprendimiento?
Pues desde hace poco yo también decía emprendeduría, hasta que fui a dar una conferencia en Valladolid sobre «emprendimiento», así lo escribían ellos en el nombre de la conferencia, y me di cuenta que emprendeduría fue un invento por comodidad o pereza lingüística. (Aunque curiosamente es mucho más fácil pronunciar la palabra emprendimiento que emprededuría.)
Para mi es un alivio decir y escribir emprendimiento. Así que, adiós a emprendeduría y bienvenido al lenguaje correcto.
Gracias por ayudarnos a anclar nuestro léxico compartido, es una labor sumamente importante.
Gracias a ti Jenifer. Entre todos, aprendemos a llamar cada cosa por su nombre 😉